1891: Assassinat de Feliciano Guiu, capellà flixanco de la Cava.

 

1891: Assassinat  de Feliciano Guiu, capellà flixanco de la Cava.

El vi de missa estava enverinat:  ¡Jesus! ¡ que amarch és este vi!

En el caserio de la Cava (Tortosa) ha ocurrido un crimen del que ha sido víctima un cura y detenido como presunto autor otro.

Parece ser que el párroco de aquel caserío, don Feliciano Guiu, empesó una misa á las cinco de la mañana. Al llegar al acto de sunción, encontró desagradabel gusto al vino, y exclamó: - ¡Jesús! ¡ amargo es este vino!

Inmediatamente le sobrevino una congoja que le impidió  concluir la misa. Varios fieles se acercaron, conduciendolo al exterior del templo, mientras se enció ás la Enveija en busca de un médico.

Poco después se notaron en el párroco fuertes convulsiones que le hicieron exclamar: - ¡Me han envenenado!.

El Motín, periòdic satíric de Madrid, oferia a la portada del 10 d’octubre de 1881 tota mena d’informació sota el curiós titular Rivalidades de oficio. El text acabava amb un final irònic en què es donava dos consells als clergues:

1. "Guárdese todo clérigo de cualquier colega con quien haya tenido alguna cuestión de faldas ó por ochavos"

2. "Llévese de casa el vino de consagrar, porque está visto que las benedicciones, que tienen el privilegio de convertir el vino en sangre de Cristo, no lo tienen para quitar la eficacia de los venenos..."

Opinión. 30 - 9 - 1891

          EL CRIM DE LA CAVA

 "La ultima misa". El mossèn de la Cava, el senyor Guiu, com de costum, es llevà a trenc d’alba, donà menjar a les gallines i, a dos quarts de sis, es vestí amb els sagrats ornaments per començar a celebrar la missa davant de nombrosos feligresos i ... 

 ¡Jesus! ¡ que amarch és este vi!.

          LA VÍCTIMA

Feliciano Guiu, nascut a Flix el 1836, durant la Primera Guerra Carlina, company en el sacerdoci d'altres flixancos que van optar també pels estudis eclesiàstics, com Josep Agramunt i Antoni Diez, reconeguts capellans trabucaires carlíns.

La víctima, reverendo D. Feliciano Guiu, de unos cincuenta y cinco años de edad, era natural de Flix, persona muy apreciada en el Delta del Ebro y que desde la Enveija pasó á la Cava á ocupar la vacante que á fortiori había dejado el Sr Fava. Vivía tranquilo y solo en la abadía, donde le llevaban la comida, y era tal su confianza que dejaba los vinajeras en la iglesia al lado del altar sin cerrarlas y bien ajeno de que nadie pudiese abrigar contra él criminales propósitos.

 

Iberia. 1- 10 - 1891

L'ASSASSÍ

 

Domingo Favà, mossen Canyet, sacerdot poc exemplar en la conducta cristiana, "de no muy buenos antecedentes ... hace poco estava procesado por supuesta falsificación y disparo de arma de fuego".

 

D. Domingo Favá, conocido en aquella partida, donde reside hace muchos años, más que por este nombre, por el de Mosen Canyet, apodo que sintetiza su esquelética figura, és un sacerdote de no muy buenos antecedentes, al que el ordinario ha retirado varias veces las licencias, y hace poco tiempo estava procesado por supuesta falsificación y disparo de arma de fuego.

Sus costumbres corren pareja, y hasta tal extremo se ha saturado del ambiente en que vive, que la razón más convincente que empleaba para inclinar al bien á sus feligreses, era el santo garrote.

Desde hace algún tiempo vivía profundamente enemistado con el interfecto, lo que suponemos habrà contribuido a despertar las sospechas de la justicia.

Diario de Tortosa. 29 - 9 - 1891

 Finalment  mossèn Domingo Favá, presumpte assassí, més conegut com Mossèn Canyet, fou pres: - "ha sido reducido á prisión, e ingresado en esta Cárcel, el Presbítero D. Domingo Favá, habitante también en aquel punto" (la Cava)

 

El Correo Militar. 5 - 10 - 1891