Pere Joan
Puig Arbonés (a) lo Cuto de Riba-roja d'Ebre: carlisme, Maials,
festes de la Granadella, mossèn al servei del marqués de Marianao, 1886, una detenció
de pel·lícula a l'estació de Tarragona, La Correspondencia de España, el
Día, intent de suborn a la guardia civil, una maleta ben curiosa: amb una pistola, una canana amb 18 cartutxos,
dos rosaris i escapularis i dos llibres: Maná
del sacerdote i Víva Jesús.
La
Correspondencia de España, 20/09/1886
"El miércoles
último fué preso por la guardia civil de Tarragona en la estación de aquella
capital un sacerdote reclamado desde
mayo último por uno de los juzgados barceloneses en méritos de cierta
clase criminal.
Durante el tránsito
desde la estación al gobierno civil, parece que dijo al cabo de benemérito
cuerpo:
- Yo puedo
proporcionarle ascensos, dinero y todo cuanto apetezca, si nos entendemos y me
das la libertad.
El preso es el
célebre D. Pedro Juan Puig (a) el Cuto, de Ribarroja, oficial carlista en la
partida del cura de Flix, muy conocido en los pueblos de la Ribera del Ebro por
sus muchas fechorias.
Después de la
guerra, emigró a Francia, donde el poco tiempo logró ser ordenado de
presbítero. Escudado con el hábito, entró diferentes veces en España,
interviniendo en negocios de vinos, de los cuales hay mucho que decir.
Ultimamente
desempeñaba el cargo de capellán de Marqués de Marianao, en el manso que posee
en Montbrió, cerca de Reus, y en las últimas elecciones trabajó con ardor entre
sus antiguos camaradas a favor de la candidatura de su protector".
El Dia, 21/9/1886
"Hace algun
tiempo los periódicos de Barcelona dieron
cuenta de haber sido detenido en aquella capital un tal Monté, con una
maleta, perteneciente al cura don Pedro Joan Puig. natural de Ribarroja y que se
habia hecho tristemente célebre durante la última guerra civil, por haber militado
como cabecilla en fos carlistas con el nombre de «Lo Cuto».
La maleta en
cuestión contenia los objetos siguientes:
Una magnífica pistola con culata postiza, que
se convertía fácilmente en buena carabina; una canana con 18 cartuchos; una
caja de cartuchos; 45 cápsulas de distintos calibres; 31 cartuchos sin cargar;
una cajita de pólvora; dos libros titulados
Maná
del sacerdote y Víva Jesús; dos
bolsas con perdigones; una funda de revólver; dos rosarios y dos escapularios;
varios útiles para afeitar; una lima; un purificador y varios otros objetos de
uso particular.
Todas cuantas
gestiones se hicieron por la policía en aquel entonces para detener al tal cura
no dieron resultado, hasta que ayer, al llegar á esta ciudad el tren de Lérida,
fué hecho preso por la guardia civil y conducido á la cárcel de Pilatos, y á
disposición del tribunal correspondiente.”
Onze anys abans,
el setembre de l'any 1875, a les acaballes de la III Guerra Carlista, la partida del Cuto, després d'haver rebut una desfeta amb morts a Maials, havia entrat a la
Granadella on celebrava el darrer dia de la festa major, un dia de trist record, segons podem llegir a la crònica del Diario
de Tarragona:
"Acabo de saber que anteayer, último día de fiesta de la
Granadella, se presentó el jefe carlista Cuto con 10 hombres, resto de su partida
desbaratada en cuatro ó cinco
días por la activa persecución
que ha sufrido,
y como alguno de sus individuos
se propasó contra la población, ésta se ha levantado contra ellos, habiendo resultado de la reyerta tres muertos y un herido. Debo llamar la atención sobre la particularidad de que en
dicha población
contaban los carlistas hasta el presente,
con una mayoría
de partidarios, y significa mucho
una rebelión tan manifiesta" (Diario de Tarragona . 24/9/1875).
Eren els anys del Far West ebrenc, les cròniques recorden com el Cuto, famós carlí per formar part de la partida de Josep Agramunt (a) el Capellà de Flix, havia sofert la ira del bàndol governamental el passat mes de juliol del 1875 quan els anomenats "voluntaris de la república", un cop havien recuperat el castell de Flix al carlins (19 de juny), anaren a casa seua de Riba-roja tot raptant i empresonant la seua mare, el seu germà i la cunyada.
Per la seva part el diari L'Epoca ( 22/9/1886) escriuria:
“El miércoles último fué preso por la Guardia civil de
Tarragona, en la estación de aquella capítal, un sacerdote reclamado desde mayo
buscado por uno de los Juzgados barceloneses en méritos de cierta causa criminal.
Parece que hizo ofrecimientos para obtener su libertad.; pero, como es natural,
fueron rehusados.
El preso
es el célebre D. Pedro Juan Puig (a) El
Cuto), de Ríbarroja, oflcíal carlista dé la partida del cura de Flix, muy
conocido en los pueblos de la Ribera del Ebro por sus muchas fechorías.
Después
de ía guerra emigró á Francia, donde al poco tiempo logró ser ordenado de
presbítero. Escudado con el hábito, entró diferentes veces en España,
interviniendo en negocios de vinos, de los cuales hay mucho que decir.
Últimamente desempeñaba el cargo de capellán de un titulo, en el manso
que posee en Montbrió, cerca de Reus.”