22 de maig del 2012

22 DE MAIG DE 1886, CARTA DEL "CAPELLÀ DE FLIX".


El curiós setmanari madrileny “El Cabecilla ”, publicà el 22 de maig de 1886, a l’apartat anomenat “Trabucazos”, una carta del flixanco més famós i controvertit del segle XIX, conegut popularment com el cura de Flix”: en Josep Agramunt. Descobrir aquest setmanari autoanomenat “periodico satírico, tradicionalista, montaraz de pura raza”, ha estat una veritable troballa per conèixer el carlisme durant el periode de la Restauració borbònica, i aquest número en concret per conèixer de primera mà les idees tradicionalistes, amb un escrit amb tots els ets i uts del del capellà flixanco, un dels pocs escrits seus coneguts:

Com comença el redactor en cap del setmanari: “Nuestro muy querido amigo, el consecuente y leal tradicionalista, D José Agramunt (comunmente conocido por el cura de Flix) nos escribe desde París (donde está emigrado desde la terminación de pasada campaña), y con fecha 16, una cariñosa carta de la qual vamos a tomar los siguientes párrafos, muy oportunos en estos momentos, y que por estar escritos por tan reputado y valeroso jefe, leeran con gusto nuestros amigos, dice así:”

"Y ya que por incidencia hablo de este asunto, no concluiré esta carta sin decirle que seria muy conveniente que en la brillante campaña que en su ilustrado y acreditadísimo peródico está llebando a cabo con el noble empeño de la defensa de nuestra santa causa, hiciese observar que no sabiendo el Gobierno de los liberales como ofender a nuestro partido, se entretiene en suponer a los carlistas ocupados siempre en pequeñas conspiraciones, y en llevar a la frontera armas y municiones para introducirlas en España; y eso crea usted que lo hacen y dicen solo por tener los ànimos inquietos pues sabido és de todos y por todos lo que claramente ha manifestado nuestro Rey y Señor, el cual reprobará todo acto de violencia, en estos aiagos y fatales días porque nuestra patria atraviesa luchando siempre con las oscilaciones de los partidos liberales, que ni se entienden ni entenderán jamás porque sus ciegas ambiciones ante el germen de la discordia que destroza nuestra desventurada nación, digna de mejor suerte. Nuestro amado Rey condolido de tanta desventura ha dicho que no quiere en manera alguna agravar los males de la patria, y que tomará a su cargo la salvación de España, cuando las circunstancias que se aproximan y los excesos de la demagogia, que no se haran esperar, haga necesario su intervención armada o pacífica, para salvar a España de las vergüenzas de la Revolución y del liberalismo..."

Josep Agramunt, des de que havia sortir de la presó de Valls l’abril de 1879, havia recuperat per ordres directes del Papa els hàbits de capellà, s’havia exiliat a París on feia de mossèn al cementiri de Clichy. Amb tot, i malgrat tot, era tot un referent del carlisme. Escrits com aquest donen a entendre que el servei a seu Rei i Senyor eren indescutibles davant el liberals, aleshores (1886) en plena Restauració Borbònica, i pendents del naixement de futur rei Alfons XIII. Per a més informació podeu llegir:
                       http://blogdepere.blogspot.com.es/2006/12/lo-capella-de-flix_19.html